Viaje sin mapas

Era casi seguro que habría seguido viaje. Se iba al África occidental. Quería ir a la República de Liberia. Pretendía alojarse en su capital Monrovia. Examinó el mapa en blanco habitual de la pared, contempló sus lindes con otros países africanos como son al este con Costa de Marfil, al norte con Guinea y al noroeste con Sierra Leona, en ese momento, le estampan un sello rojo en el pasaporte y le indican que firme “la Declaración de un extranjero a punto de partir para la Republica de Liberia”.

Actualmente, el territorio liberiano transita una etapa de innegable estabilidad. La paz se tambalea, se deriva esa situación de su endeble asentamiento del Estado de Derecho y  los números conflictos por la lucha de sus recursos. Asola la tierra liberiana la interminable guerra civil, el brote de epidemia de ébola en 1914, la merma de ingresos, en concreto, la minería, la corrupción… por lo que cae el precio de materias primas.
 El océano Atlántico baña la costa liberiana 560 km. Navega por ríos  Cavally, Mano y Morro, se extiende Liberia, mayormente, por una llanura, con una superficie de 111.370km²[1].

Tenía la oportunidad de conocer un viento del mundo, curativo y le llaman doctor. Se le atribuyen propiedades curativas, es un viento aliso -sopla sobre el atlántico de manera bastante constante- de África Occidental. Se caracteriza por ser frío, seco y polvoriento. Sopla desde el desierto del Sahara a través del golfo de Guinea y las islas de Cabo Verde. Se le denomina a este viento del desierto como harmattan[2].

Graham Greene viaja por todo el mundo. Visita países en crisis[3] y, en 1935, se adentra en el continente africano en un Viaje sin mapas[4]. El espíritu greeneano aflora en el libro:

Soy católico con una fe intelectual. 

El escritor británico nace el 2 de octubre de 1904 en Berkhampsted (Hertfordshire, al norte de Londres). Estudia en la universidad de Oxford, entra en el Times y se convierte al catolicismo en 1926 y se casa con Vivien Dayrell-Browning en 1927... Cuya obra refleja los conflictos espirituales de un mundo en decadencia.

Se detiene en 1946 en España por motivos profesionales. A partir de este año, frecuenta el territorio español entre 1976 y 1989.  Le inspira la novela Monseñor Quijote (1982).

¿Graham Greene hizo un Viaje sin mapas?

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[1] Informes de Secretaría: Guía de País. Actualizada en 2019. 

[2] Harmattan 

[3] Vietnam durante la guerra de Indochina entre 1946-1954, Polonia en tiempos de la Guerra Fría, Kenya durante la revuelta de los Mau-Mau.

[4] Viaje sin mapas. En 1935, un Graham Greene de apenas 30 años con la cabeza llena de ideas románticas sobre el continente africano viajó a Liberia. De este país, a Greene le atrajo su condición virginal; era un país apenas explorado, y mucho menos cartografiado, que luchaba por sus señas de identidad tras sacudirse el yugo colonial. Su periplo, que tuvo como colofón una enfermedad severa, reafirmó sus ganas de vivir y su vocación literaria; y dejó para los anales uno de los mejores libros de viaje del siglo XX.