¿Es válido utilizar el pretérito para proyectar el porvenir? ¿Desorienta el albur al racionalista? ¿Se controla el efecto azar? ¿Quién se compromete a pronosticar el futuro? ¿Somos resistentes a los eventos difíciles de predecir? ¿Se dilucide el mundo del azar por medio de la metáfora del cisne negro?
Alienta, el pensador de la incertidumbre, Nassim Nicholas Taleb una sociedad resiliente. Propone la teoría del Cisne Negro. Se concibe dentro la visión epistemológica nuevo humanismo científico.
Clara Inés Sánchez Arciniegas plantea asimilar la metáfora del cisne negro de Nassim Taleb con el fenómeno del turismo para indagar sobre los efectos del terrorismo en el comportamiento difícil de pronosticar de las hordas de turistas que viajan por el planeta.
Desestacionaliza la demanda turística el turismo oscuro a igual que el turismo cultural. Surge dark tourism. Clasifica esta tipología de turismo Lennon y Foley en turismo de batalla, turismo de cementerio, turismo de desastres o catástrofes naturales, turismo de fantasmas, turismo de holocausto y prisiones. Elabora, también, una clasificación Seaton. Lo inicia con ejecuciones y muerte en público... por tanto, se enmarca el turismo en una suerte de fascinación mórbida.
En fin, se refleja esa fascinación mórbida cuando viajan los turistas alrededor del mundo, saben de la probabilidad tanto alta como baja de un atentado, se registran ataques terroristas, nadie los puede controlar ni predecir y se sigue todavía viajando. ¿Por qué?
Somos resilientes viajeros.